Preámbulo de un viaje
Ubicarse en
un espacio y sobretodo en un tiempo. Blanquear: dónde estoy, qué estoy
haciendo. Reflexionar, de la misma manera, cómo estoy con todo eso y qué
oportunidades me brinda mi actual momento. No olvidar, ni evadir: estar bien o estar
mal depende de amistades, de espacios, de familia, de climas, de ciudades, de amores, de debilidades y
fortalezas, de más risas que llantos, de más llantos que risas. Observar
alrededor de uno en busca de soluciones. Detenerse, pensar. Buscar ejemplos en conocidos
con experiencia en sus espaldas y anécdotas a cuestas. Detectar soluciones
adoptadas por ellos mismos para estar más bien que más mal. Comunicarse con
gente, tendente al optimismo. Concluir en la necesidad de un cambio, o un chispazo
profundo. Al fin, viajar.
Comentarios
Publicar un comentario